Ancelotti tiene un principio de acuerdo para convertirse en seleccionador de Brasil a final de temporada. Aunque tiene contrato hasta 2024, el Real Madrid no pondría ningún problema a su salida. Carletto ya ha contactado con Kaká, que sería su director deportivo y enlace con la CBF, y con Cafú, que ejercería de entrenador ayudante, para que estén a su lado. A ambos los tuvo a sus órdenes en su época en el Milan.
Aunque Carletto insiste en que quiere seguir en el Real Madrid “toda la vida”, tanto el técnico como el club saben que su continuidad está supeditada a ganar la Copa o la Champions. Con la Liga perdida igual que la Supercopa de España (ambas frente al Barcelona), a Ancelotti sólo le salvará eliminar de la Copa al propio Barça en el Camp Nou o levantar La Decimoquinta, en la que el Madrid tiene un camino plagado de trampas.
Por eso Ancelotti decidió guardarse las espaldas al llegar a un acuerdo para convertirse en seleccionador de Brasil a final de temporada. Pase lo que pase, el técnico italiano se asegura seguir entrenando. O continúa en el banquillo del Bernabéu o afronta la aventura de dirigir a la tetracampeona del mundo.
Los amigos de Ancelotti
Y Carletto no llegaría solo a Brasil. Lo haría con dos ayudantes de lujo. Por un lado, Kaká sería una especie de director deportivo que ejercería las labores de enlace entre el seleccionador y jugadores con los cargos directivos de la CBF. Por otro, Cafú se sentaría al lado de Ancelotti como seleccionador ayudante de Brasil. A ambos futbolistas los tuvo el italiano a sus órdenes cuando dirigía la Milan con el que ganó sendas Copas de Europa.
Ancelotti no deshojará la margarita hasta que el Real Madrid haya concluido su temporada, ya sea con las finales de Copa y Champions si es que llega o antes, lo que sería una mala señal para la continuidad del italiano en el Madrid. Aunque a Carletto siempre le quedará Brasil.